viernes, 7 de febrero de 2020

Separación

Verte marchar bajo la lluvia me provocaba mucho dolor. No podía evitarlo y mis lágrimas se escapaban. Sentada en el autocar, viendo cómo te alejabas, intentaba esconder mi rostro apoyando mi cabeza en el cristal.
El día no me ayudaba, la lluvia me invitaba a soltar mi propio diluvio. Mi corazón compungido no podía ayudarme a seguir.
Recordaba nuestro tiempo juntos, paseando por las calles agarrados de la mano, sonrisas y besos, tan acaramelados y juntos. 
¡Qué noches más amorosas y qué despertares tan llenos de besos!
Respirábamos amor por todos los poros de nuestra piel. Cuando me mirabas, se iluminaba tu cara, era pura poesía de amor y yo me derretía. Nunca pensé que el amor fuera así, un sentimiento tan fuerte y tan puro. Tampoco pensé que yo le mereciese, pero nuestros destinos nos unieron. 
Y aquí estoy llorando por mi vuelta, ocultándome de miradas ajenas, y mi corazón sufriendo por los kilómetros que nos van separando. En mis ojos llevo grabada tu imagen encogida bajo el paraguas y sé también que tú te vas llorando.



Autora: Olga González Sobrín

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